Bonifacio Alza erró su vocación. Fue socio fundador, junto a su cuñado Dionisio, de Confecciones Alza.
El negocio de la moda funcionó... a medias durante unos años. Pero luego, una mala administración de su cuñado Dionisio, a la sazón contable de la empresa, dio al traste con las pretensiones de Bonifacio de hacerse millonario.
Esto es lo que dicen los libros de historia y los libros contables. Pero lo cierto es que al bueno de Bonifacio le hubiera ido mucho mejor si en vez de dedicarse a la moda, hubiera establecido una zapatería. Pensadlo bien y veréis como sí.
Por no hablar de cómo le hubiera ido si hubiese sido corredor de bolsa.
"¡VENDED AL ALZA!"
2 comentarios:
Es lo que tiene llamarte "Dioni", que nadie te toma en serio o te deja la pasta, menos aún si vas en furgón blindado.
Publicar un comentario