viernes, 10 de diciembre de 2010

Reflexión a bote pronto #239

Cuando Dios abre una puerta, cierra otra.
No soporta que haya corriente.

1 comentario:

Unknown dijo...

Quizá Dios funciona de alguna manera distinta... no hay que pedirle cosas, si no pedir perdón después de robarlas... jejeje