- La valía de un equipo de fútbol se corresponde a la suma de la valías de los jugadores que lo componen.
- Un equipo juega siempre al mismo rendimiento, no importa el momento de la temporada ni ante qué rival.
- Todos los jugadores de un equipo deben ser delanteros finísimos, rápidos, y de técnica depurada. A mala leche, como mal menor, le dejamos jugar también a un portero.
- Lo único que importa en un jugador de fútbol es su técnica individual. Da igual que no sepa colocarse en el campo, da igual que no entienda las órdenes de su entrenador, da igual que se canse a los cinco minutos de estar en el campo, da igual que no entienda el juego... si es capaz de dar más de 100 toques al balón sin que este toque el suelo merece estar en un equipo de élite. Todo sea por el tiki-taka.
- En realidad, el fútbol no es tan misterioso. Si mi equipo es mejor que el otro, ¿para qué vamos a jugar si yo tengo que ganar en el 99% de las ocasiones? Si jugamos corremos el riesgo de permitirles ganarnos.
5 comentarios:
La clasificación final de cualquier competición debiera corresponder directamente al presupuesto de cada uno de los equipos participantes o, en su defecto, de los ingresos publicitarios
Muy buena, Mic.
Yo añadiría que si un equipo no ha bajado de división nunca en su historia, se debe impedir que lo haga, cualesquiera sean los árbitros...digo...medios.
Otra, otra!!!
Como lo que mola es el fútbol de ataque y la defensa es una mierda...
Pues que en cada tiempo ataque un equipo y el otro descanse. Y al final del partido gana el que meta más goles.
endevé,no hay nada como el fúrgol pa que la gente opine
personalmente añadiría que son once contra once y que el fútbol es asín,(toma ya originalidad)
animalvoy
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