- Isidoro, ¿tienes huevos?
- ¿Que si tengo huevos? ¿Que si tengo huevos? ¿Cómo los quieres, duros o pasaos por agua? ¿Que si tengo huevos dice el tío? ¡Pelaos! ¡Los tengo pelaos! Pelaos de currar y de exprimirme las meninges para llegar a fin de mes... Que llevo toda la vida currando y total para qué... Mira, niño, yo a tu edad ya estaba hartito de currar... Y vosotros, los jóvenes, miraos... ¡dais pena! ¡Pena, penita, pena! No creéis en nada, no lucháis por nada, os da todo igual... sólo queréis follar y drogaros. ¡Qué futuro más triste nos espera con esta generación! ¿Estos son los que me tienen que pagar la jubilación a mi! ¡Apañao estoy! Y aún tiene los santos huevos de preguntarme si tengo huevos... ¡Sí, tengo huevos! ¿Qué pasa?
- Nada, nada... ¿Me das un tazón de sal?
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