Varsovia, Polonia, octubre de 1943.
Un polaco huye del ghetto y es perseguido por un soldado nazi.
El polaco tropieza, se levanta y sigue su huída por un callejón sin salida, muy oscuro.
El soldado le da alcance y le encañona con su rifle.
Entonces una luz sobrenatural aparece y se posa sobre la pared del fondo del callejón, aparece un ojico enmarcado en un triángulo isósceles. Del ojico sale una voz que, tras carraspear, le dice al soldado:
- Has de dejar vivir al polaco. Está escrito que este polaco sea Papa en el futuro.
- Sí, pero... ¿y yo? -repone el soldado alemán.
- No te preocupes, tú serás el siguiente Papa, justo después del polaco.
1 comentario:
plagiador!!!!
Publicar un comentario