jueves, 3 de julio de 2008

Las tronchantes aventuras de Wenceslao Pi

Wenceslao Pi (wп en lo sucesivo) era un profesor de matemáticas aficionado a la resolución de ecuaciones de segundo grado y a trepar árboles. Un día se subió a un boj y una de las ramas del árbol se tronchó, cayendo nuestro profesor al suelo como consecuencia de ello. Fruto de la caída wп se tronchó tres costillas. Durante su convalecencia en el hospital, recibió un presente: una caja de yemas de Santa Teresa revenías. En la nota adjunta a la caja de dulces se podía leer: “wп, no hace falta que te recuperes, tus alumnos te olvidan.” El estado de ánimo de wп se tronchó.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

¿No fueron 3,1416... costillas tronchadas?

Pedro dijo...

Pues también tiene usted razón, Carmona.

Es lo que tiene la prosa redondeadora, que a veces peca de inexacta.

Anónimo dijo...

jeej,
Yo también me troncho :-D